El Instituto Nacional de Cáncer Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares, institución gubernamental descentralizada, de tercer nivel de atención, creada para prestar servicios de salud a las personas con cáncer o con una alta sospecha de patología oncológica, lleva su nombre en homenaje a la Sra. Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares, quien desde joven trabajó en servicios de voluntariado a beneficio de las personas enfermas.
En el 1962 trabajó como voluntaria por primera vez en el dispensario de Gualey, y un año después, mientras residía en Nueva York, ingresó al voluntariado del Hospital Sloan Kettering. De regreso al país en 1968 se unió a un grupo de amigas para visitar enfermos en el Instituto de Oncología Doctor Heriberto Pieter.
Dos años después, la iniciativa se formaliza y se constituye en la Asociación de Voluntarias del Instituto de Oncología, del cual doña Rosa Emilia fue elegida presidenta. En 1974 fundó la farmacia “Milagro de la Caridad”, cuyo propósito era proporcionar a los pacientes pobres con cáncer los medicamentos oncológicos a precio bajo, aunque en numerosas ocasiones los donaba a quienes no podían adquirirlos.
En 1982 fue designada vocal en la Liga Dominicana Contra el Cáncer. Cinco años después, en 1987, fue nombrada vicepresidenta de la institución y en 1988 asumió la Presidencia ante la enfermedad del doctor Arturo Damirón Ricart.