Dirigentes, entrenadores, así como algunos atletas de alta competición, dada su precaria situación, han tenido que ser auxiliados por los planes sociales que ha implementado como parte de su campaña política, el candidato del gobierno. En ese mismo criterio vimos recientemente en los medios de comunicación al ministro deportivo Danilo Diaz, mientras arengaba un grupo de dirigentes deportivos sobre los planes de ayuda que el ministerio bajo sus ejecutorias, tenía contemplado para ellos en estos días de crisis sanitaria.
En ese orden, no me cabe la menor duda de que el movimiento deportivo nacional no cree en las promesas circunstanciales que ciertos políticos y funcionarios, encumbrados en las esferas de poder, puedan hacerles en este momento gris que tantas preocupaciones llevan a su conciencia. Independientemente de esa indeseable realidad sistémica de la cosa pública en el país, saben que deben garantizar su sobrevivencia y la de sus familiares.
En circunstancias tan adversas para su vida, el movimiento deportivo nacional ha quedado sin una orientación precisa y clara de quienes dicen ser sus verdaderos líderes a la luz de la pirámide olímpica, estructura funcional del deporte en el país. Como sabemos, esta comprende una primera base de trabajo conformada por clubes y ligas, luego las asociaciones por disciplinas, las Uniones Deportivas, las federaciones de cada deporte, y finalmente, el Comité Olímpico Dominicano.
A duras penas el señor Luis Mejía Oviedo, ha dejado ver su rostro en los medios de comunicación solo para apoyar el confinamiento nacional. Jamás a utilizado ese acceso mediático que con tanta facilidad adquiere, para conducir los destinos de tantos hombres y mujeres cuya vida es y se desenvuelve en las actividades atléticas.
Aparentemente, el señor Luis Mejia Oviedo ha soltado a su suerte durante la pandemia, al movimiento deportivo nacional y sus más apremiantes necesidades. Por lo visto ha olvidado que es el máximo responsable de garantizar su normal funcionamiento, aún en circunstancias adversas como las actuales.
Pensé en algún momento de mi vida deportiva , que la función de una institución tan influyente y poderosa como el comité olímpico dominicano en la sociedad dominicana, no solo se circunscribía a conformar las distintas delegaciones oficiales para competencias centroamericanas, panamericanas y mundiales.
Cómo es posible que un organismo con tantos recursos nacionales e internacionales , no pueda dedicarse, en tiempos de emergencia nacional, a desarrollar acciones tendentes a mitigar los temores y necesidades de tanta gente pobre que hace deporte bajo limitadas condiciones económicas?
Dado el carácter político partidista del momento, el ministro de estado de deportes ha comido con su dama, y claro está, la alta dirigencia del deporte olímpico nacional, se ha hecho de la vista gorda.
Para salvar la dignidad e integridad de la familia deportiva nacional, entiendo que el señor Luis Mejia Oviedo pudo muy bien, y puede todavia, desarrollar junto a su comité ejecutivo, federaciones, asociaciones, uniones deportivas provinciales, clubes y ligas, un programa de protección y seguimiento a la población deportiva de menos recursos económicos.
El financiamiento de ese programa lo puede suplir el Comité Olímpico Dominicano de cuatro fuentes que constantemente engrosan recursos frescos a su cuenta bancaria. Destacan entre estos los siguientes:
La asignación de recursos económicos que por ley se le asigna en el presupuesto general de la Nacion.
Los recursos económicos que cada año programa para el ciclo olímpico el Comité Olímpico Dominicano, con cargo al presupuesto asignado anualmente al ministerio de Estado de Deportes y Recreacion.
Los recursos en euros y dólares del programa internacional SOLIDARIDAD OLÍMPICA, del cual nuestro deporte es beneficiario año tras año.
Y por último, los recursos que de manera habitual aportan empresas y sus ejecutivos que forman parte del programa CREANDO SUEÑOS OLÍMPICOS(CRESO).
Precisamente, resulta favorable preguntarnos, cuáles empresarios del programa CREANDO SUEÑOS OLÍMPICOS (CRESO), han sido contactados, motivados y convencidos por el magnanime presidente del comité olímpico dominicano, Luis Mejía Oviedo, para que hagan una erogación extraordinaria de recursos económicos o materiales, con la intención especial de ayudar a los hombres y mujeres que día a día se preocupan por prepararle al país delegaciones dignas y de alta calidad técnica?
Este es el momento para disponer en forma ordenada, la entrega de esos recursos a la gente que más lo necesita en el deporte. Ellos, como todos en el país y el mundo, tienen deudas pendientes con los bancos, con las telefónicas, con el colmado, con el colegio, con su salud y su alimentación.
Que no le vengan con el cuento a la familia deportiva del país que esos recursos están especializados para determinadas competencias internacionales.
Lamentablemente, la programación olímpica mundial durante el 2020 se cayó. Toda fue pospuesta para el 2021 y el 2022. Esa realidad que a nadie agrada en el deporte, permite al comité olímpico y al ministerio de deportes, invertir los recursos de casi nueve meses, en proteger de los efectos de la pandemia COVID-19, casi toda la población deportiva del país.
Agustin Cortès Robles.
Junio 28, 2020.-
