La senadora Aracelis Villanueva, representante de San Pedro de Macorís, sometió una propuesta legislativa que plantea la creación de zonas designadas para quienes disfrutan escuchar música a altos decibeles, con el objetivo de minimizar el impacto en la salud y el medio ambiente.
La iniciativa surge como respuesta al auge de una práctica popular en diversos sectores del país, donde es común el uso de potentes sistemas de sonido en espacios públicos, provocando molestias a residentes y contribuyendo a la contaminación acústica.
“Estamos frente a un fenómeno cultural que requiere organización. Este proyecto busca ofrecer un espacio adecuado para quienes practican esta actividad, sin que interfiera con el bienestar de los demás”, indicó la legisladora durante su intervención en el Senado.
La propuesta contempla que las áreas serán definidas por los gobiernos locales y estarán bajo la regulación del Ministerio de Medio Ambiente junto a la Dirección General de Espectáculos Públicos, quienes velarán por su correcto funcionamiento.
Villanueva hizo un llamado a sus colegas congresistas para respaldar la pieza, la cual, aunque reconoce como retadora, considera esencial para armonizar el derecho al disfrute con la necesidad de mantener la paz en las comunidades.