El 4 de julio ha sido testigo de uno de los registros más calurosos en la historia, la temperatura global promedio sobre la superficie del planeta marcó el martes el récord de 17,18 grados Celsius (62,92 Fahrenheit), según un análisis de la Universidad de Maine.
Los científicos creen que el 4 de julio pudo haber sido el día más caluroso en la tierra en unos 125.000 años.
Este récord en las temperaturas se debe al fenomeno de El Niño y al cambio climático que desempeña un papel fundamental.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), señaló que el efecto de El Niño podría causar un verano lluvioso en el sur de Estados Unidos y en la costa del Golfo de México.
Estas altas temperaturas no solo afectan la comodidad de las personas, sino que también serios riesgos para la salud, especialmente para los grupos vulnerables como los niños y personas de la tercera edad.
El registro de las temperaturas más calurosas en este día destaca la urgencia de abordar el cambio climático y tomar medidas para mitigar sus efectos.