EFE
MOSCÚ. – El Kremlin calificó este jueves y de “inamistosas” las sanciones impuestas por la Unión Europea (UE) contra seis altos cargos rusos y una institución científica de Rusia por el envenenamiento en agosto pasado del líder opositor Alexéi Navalni.
“Para nuestro pesar esto es un paso deliberado e inamistoso hacia Rusia”, señaló en su rueda de prensa diaria el portavoz presidencial, Dmitri Peskov.
El Kremlin considera que las sanciones antirrusas adoptadas por la UE este jueves perjudicarán aún más las relaciones entre el bloque comunitario y Moscú.
“Con esta decisión, el Consejo de la UE ha infligido daño a las relaciones con nuestro país”, recalcó Peskov, quien además dijo no ver la lógica en la selección de los sancionados por parte de la UE.
El Kremlin recordó las palabras del ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, que prometió el miércoles medidas simétricas a las sanciones comunitarias.
Peskov señaló que Rusia analizará la situación y reaccionará acorde a sus intereses.
“En general, las decisiones que vinculan las relaciones entre la UE y Moscú a una persona que es considerada en Europa el líder de cierta oposición (rusa), por supuesto causan sobre todo pesar”, reiteró el portavoz presidencial.
También negó que se haya creado algún tipo de grupo dentro de la Administración Presidencial para desacreditar a Navalni. “Esto no es así”, afirmó Peskov.
“La parte triste de este asunto es que no hay ninguna lógica en tal decisión. Esta es probablemente la circunstancia agravante de la decisión adoptada por el Consejo de la UE”, sostuvo.
La UE incluyó en su lista negra de personas y entidades a las que prohíbe la entrada y el acceso a activos en territorio comunitario a Andréi Yarin, jefe de la Dirección de Política Interior de la Presidencia; y a Serguéi Kiriyenko, vicejefe primero de la Oficina Ejecutiva de la Presidencia.
También impuso sanciones a Serguéi Menyailo, representante del presidente de Rusia en Siberia; Alexandr Bórtnikov, director del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB), y a los viceministros de Defensa Pável Popov y Alexéi Krivoruchko.
Asimismo, la medida afecta al Instituto Estatal de Investigación Científica en Química Orgánica y Tecnología, que tiene responsabilidad en materia de destrucción de los arsenales de armas químicas heredados de la Unión Soviética.