SANTO DOMINGO. “Bueno líder, usted la macó”, le dijo ayer un agente de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) al director general de Aduanas, Eduardo Sanz Lovatón, cuando le ponía una multa porque el funcionario cometió una infracción.
Sanz Lovatón invadió ‘el paso de cebra’ o línea peatonal, cuando circulaba en su vehículo por la avenida Abraham Lincoln. No importó que el vehículo tuviera la placa oficial de la institución: el agente lo multó como quiera y le entregó el documento de la contravención.
“Conducía solo por la Lincoln. Descuidado me detuve encima de las rayas peatonales. El agente lo señaló y me multó. Al ver mi placa me preguntó si ese era yo, le dije que sí, me saludó cortésmente y me entregó mi multa”, relató en su cuenta de Twitter.
El incidente ha avivado las redes sociales digitales con unos comentarios a favor y otros en contra. Algunos alegan que no importa si es un funcionario: debe ser multado si infringe la ley. Otros elogian la actitud de Sanz Lovatón, apreciando en él a un ciudadano común que reconoce sus errores.
