Las enfermeras del área de obstetricia y neonatología de un hospital de Tailandia los utilizan para cuidar a los recién nacidos del virus tan contagioso, según reseña la NBC .
No son mascarillas normales. Son máscaras transparentes que se sujetan a las cabezas de los bebés, los protegen del contagio y permiten darles la mamadera. El uso de estos protectores se enmarca en las medidas contra la pandemia que tomó el Hospital Paolo de la provincia de Samutprakarn en Tailandia.
Aunque el virus parece afectar solo a personas mayores -las cifras en el mundo lo confirman-, los niños, los bebés y los recién nacidos no están exentos de contagiarse . Sin embargo, en su caso, la enfermedad se presenta de una forma mucho más leve con tos, fiebre, alguna dificultad para respirar y, a veces, con síntomas gastrointestinales.