Agrupaciones feministas de la región Norte expresaron ayer que la muerte de la abogada Anibel González y de Juana Domínguez Salas por parte de sus exparejas que salieron en libertad tras acuerdos con representantes del Ministerio Público, demuestra la debilidad de las autoridades y del sistema de justicia para disminuir la violencia contra la mujer y los feminicidios.
Raquel Rivera, vocera de la Coordinadora de Mujeres del Cibao y del Movimiento Feminista Hermanas Mirabal, pidió mayor protección para las mujeres y anunció para el lunes una protesta en el Parque Duarte de Santiago, para pedir que los agresores contra las féminas reciban todo el peso de la ley.
“La violencia contra la mujer continúa, porque quienes tienen que ser parte de la solución de ese problema son parte de ese problema”, indicó Rivera.
La dirigente feminista lamentó que hayan tenido que morir dos mujeres en circunstancias similares de irresponsabilidad, para que las autoridades actúen.
Agregó que hay autoridades que son cómplices de la situación y que está demostrado con estos dos últimos feminicidios. Rivera indicó que en el caso de la abogada Anibel González, el agresor salió en libertad antes de tiempo y de inmediato la mató, lo que a su juicio demuestra debilidad.
