Santo Domingo.- En el marco del denominado “Sermón de las Siete Palabras” la iglesia católica criticó, una vez más, las prácticas corruptas de algunos funcionarios de la actual gestión de gobierno.
“Cómo es posible que haya gente obtusa que tenga tiempo y espacio, en medio de esta desgracia, para pensar sólo en llenar sus arcas a costa de la necesidad de la población”, cuestionó el sacerdote Juan Bautista Cordero.
Al criticar los actos de corrupción, en medio de la crisis sanitaria que vive el mundo, el presbítero Nelson Clark comparó a los que roban millones de las arcas del Estado con asesinos. “A estos se asemejan lo que roban millones. Los dos tipos de ladrones matan; unos en el momento y otros a largo plazo” aseguró.
Al reflexionar sobre el fragmento bíblico: “He ahí tu madre”; el presbítero Abraham Apolinario consideró que el COVID-19 vino a “quitarle la sabana al enfermo” para develar las precariedades que padecen los dominicanos en cuanto a los servicios básicos. “Carecemos de un servicio de salud primario. Eso no lo trajo el virus (COVID-19), ya estaba aquí. Dedicamos una parte ínfima, ridícula, del presupuesto nacional al sistema de salud”, señaló Apolinario.
Durante la homilía que fue presidida por el Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, Monseñor Francisco Ozoria; los sacerdotes sostuvieron que no todo está perdido. “Desde aquí vemos el despertar de una ciudadanía que aún tiene esperanza y cree, conscientemente, que por el camino que nos conducen, quienes nos han dirigido durante las últimas décadas, no es el camino correcto. Y por lo tanto, tienen necesariamente que cambiar y revisar el concepto de desarrollo; que no coincide, ciertamente, con el que se limita a satisfacer los deseos materiales mediante el crecimiento de los bienes sin prestar atención al sufrimiento y a la sed de tantos”, precisó el presbítero Pablo de la Cruz al proclamar la quinta palabra.
En el mensaje que logró trascender las paredes de la Catedral Primada de América, a pesar de la cuarentena que guarda el país, los sacerdotes animaron a los ciudadanos a ser más unidos, a trabajar por el bien colectivo y a rencontrarse con Dios.
POR: JONAN GONZÁLEZ
