“Confiada que a quien está con Dios no se le pega nada”, doña Altagracia estuvo firme haciendo fila en un centro de votación que funciona en el Club Mauricio Báez de Villa Juana.
Ella llegó sin mascarilla, sin guantes y sin ninguna protección. Dijo que tiene conocimiento de que hay un virus y que se puede pegar, pero como era algo sencillo de ir a votar y ya, ella decidió no protegerse y que, además, “a quien está con Dios no se le pega nada”.
Al igual que doña Altagracia, muchas personas acudieron a los centros de votación como el Club Mauricio Báez, repleto de votantes, muchos acudieron sin protección, aunque se observaban algunas personas con mascarillas, guantes y otras medidas para su protección personal.
Unos alegan tener gripe, sin ningunos síntomas de coronavirus, pero como sabían que iban a estar donde hay muchas personas, prefirieron protegerse.
Algunos expresaron preocupación, entre ellos personal de seguridad como militares porque muchos aseguran que no le suplieron mascarillas ni otros equipos de protección, pese a estar de cerca con tantas personas, con las que conversan y ofrecen orientación.
En centros de votación en sectores más populares de la Capital ha ido incrementándose la cantidad de votantes conforme pasan las horas en estas elecciones extraordinarias municipales.
POR . Doris Pantaleón
