Los institutos de Aarhus, segunda mayor ciudad danesa, pueden reabrir desde este martes al autorizarlo las autoridades sanitarias diez días antes de lo previsto, después de que cientos de alumnos hiciesen huelga contra la enseñanza virtual.
Dinamarca reabrió escuelas e institutos el pasado 7 de agosto, pero la subida de contagios registrada en Aarhus en las semanas previas -la mitad de todo el país- hizo que las autoridades retrasasen por dos veces el regreso a las aulas en secundaria, fijándolo finalmente para el 4 de septiembre.
Este país nórdico fue el primero de la UE en volver a abrir de forma gradual las escuelas a mediados de abril, pero los institutos no lo hicieron hasta el tramo final y no todos los cursos, por lo que algunos alumnos de secundaria llevan con enseñanza no presencial desde marzo.
El aplazamiento de la reapertura en Aarhus hizo que grupos de alumnos convocasen ayer en redes sociales una huelga contra la enseñanza virtual, negándose a conectar sus ordenadores, y reclamasen la vuelta a las aulas.
«Quiero ir a la escuela» y «No a la enseñanza virtual» son algunas de las pancartas que lucieron ayer decenas de alumnos en una concentración delante del ayuntamiento de Aarhus convocada por las principales organizaciones estudiantiles.
«Después de estudiar de forma conjunta la situación del contagio en Aarhus, las autoridades sanitarias consideran que la enseñanza presencial en los institutos puede empezar de forma gradual a partir del martes 25 de agosto», anunció horas después de forma inesperada el Ministerio de Sanidad.
La reapertura será no obstante gradual y, al menos hasta el 4 de septiembre, solo podrá estar presente en cada clase la mitad del alumnado.
El inesperado anuncio y la falta de tiempo han hecho que varios institutos de esa localidad del oeste de Dinamarca hayan retrasado al menos hasta mañana el regreso parcial de los alumnos a las aulas.